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El partido que mañana va a jugar el Atlético de Madrid en Marsella contra el Olympique es más que nunca un partido de alto riesgo. Pese a que Aguirre y Clemente Villaverde, al que acabo de escuchar en una entrevista en la Cadena Ser, quieren transmitir tranquilidad la situación es bastante preocupante.

Una de las noticias de actualidad de los últimos días es el ofrecimiento que hizo el presidente del Real Madrid a sus futbolistas de una prima de 120.000 € para cada jugador si ganaban los próximos cinco partidos. Una noticia que no pierde fuerza, más bien la recobra cuando los periodistas nos recuerdan constantemente que ya les van quedando menos victorias para cobrar.

Aníbal Barca fue un general cartaginés que nació en el año 247 aC. Provenía de una influyente familia de la ciudad africana de Cartago. Los cartagineses llegaron a la Península Ibérica fundando Cartago Nova, nuestra actual Cartagena. Desde allí empezó una guerra contra los romanos, una empresa que le ocuparía muchos años de su vida y por la cual ha pasado a la posteridad.

Al término del partido Aguirre manifestó en rueda de prensa y en las entrevistas posteriores que los protagonistas de la clasificación del Atlético de Madrid para la próxima edición de la Copa de Europa eran los futbolistas. Y así debería haber sido, pero ante la pregunta de los periodistas sobre si continuaría al frente del equipo el próximo año, Aguirre sembró la duda, y con un gesto serio dijo que no diría nada hasta el término de la temporada el siguiente domingo.

El Atleti juega el próximo partido de Liga sin un buen número de titulares, que por una u otra razón son bajas ante los mallorquines. La peor parte se la lleva el centro del campo donde no va a haber ninguno de los que inició como titulares la temporada.Esto es un síntoma de la poca o nula previsión que se ha hecho. Sabiendo como se sabe que Maniche estaba fuera del equipo desde hace más de un mes no se ha buscado un sustituto. Aguirre pensaría que con lo que tenía sería suficiente, pero tras las dos dolorosas derrotas de esta semana ha quedado claro que no va a serlo.

Todo ha cambiado en el Atleti en cuestión de unos cuantos días. Según todos los mentideros futbolísticos, Aguirre se jugaba el puesto contra el Racnig. Muchos aseguraban que no sólo servía ganar, sino que había que jugar bien, de lo contrario el entrenador podría perder el puesto. Sólo cuatro días despues nadie puede discutir la contundencia de las dos victorias en Liga e incluso, aunque a ratos, tampoco cabe duda de que se ha jugado a un nivel aceptable.

No pude ver el partido contra el Murcia. Además, creo que tampoco pudo seguirse normalmente por televisión porque al final no pudo retransmitirse por PPV, sino por La 6.

Pero, según he leído y escuchado parece que a pesar del cambio radical de plantilla, de fichar básicamente, jugadores de ataque, la estrategia del partido fue la misma del año pasado. Una vez que se marca un gol el equipo se echa atrás y a aguantar el chaparrón, si se puede. Pero muchas veces, no se puede y entonces el rival te marca un gol o dos y ya no hay solución.