En el primer partido de la elimnatoria no pudo jugar: porque estaba sancionado y porque estaba ganando la medalla de oro de la Olimpiada. Pero, todos le esperábamos. Y el Kun no falló, llegó a puntual a la cita y lo hizo a lo grande. Intervino en las cuatro jugadas de los goles de una u otra forma: para marcar gol, para robar el balón o para dárselo al compañero.