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Así, con una frase grandilocuente e inesperada, se ganó Villa a los pocos escépticos con su llegada. David Villa ha llegado con aureola de superestrella y ha sabido aterrizar con el pie derecho, lanzando todos los mensajes que adora oír la afición. Uno a uno cada mensaje llegaba como flechas de Cupido al corazón del hincha y con una sonrisa que no le ha abandonado en toda la tarde, el Guaje de España se ha convertido en el Guaje Rojiblanco y promete vivir el Atlético con la pasión que merece la camiseta.

El enorme hueco creado por la marcha de Radamel Falcao ha encontrado su perfecto remedio, un jugador que encaja desde que se anunció su llegada por ser emblema de la selección, por ser goleador incansable y por proceder del laureadísimo Barcelona pero con el mismo hambre que si fuera un juvenil inexperto. Y si esto no fuera poco, el bajísimo precio que hemos pagado por su fichaje marca un hito en el haber de los antaño derrochadores dirigentes. Villa el bueno, bonito y barato ha llegado. Sólo nos tememos los más agoreros que no haya gato encerrado en forma de derecho de tanteo u opción oculta sobre alguna de las perlas actuales. Pero por ahora continúa el idilio que hoy se ha sellado con la presentación oficial del delantero asturiano.

Con el doble de medios acreditados de los que suelen hacer acto de presencia en el Vicente Calderón y con la impresionante cifra de 20.000 personas en las gradas (a la presentación de Radamel Falcao, la más numerosa de un jugador hasta el momento acudieron 15.000) los aficionados aguardaron pacientemente unos 40 minutos que saltara al cesped el guaje. Antes de eso, presentación ante los medios y primeras preguntas:

–¿Cómo han sido estos primeros días como rojiblanco?

Villa: «Feliz. La verdad es que feliz, no sólo desde el día que se anunció el fichaje sino desde unos días antes cuando los dirigentes y la gente del club se dirigieron a mi representante. Le contaron lo importante que creían que podía ser para el Atlético de Madrid. Me hicieron llegar el cariño que necesitaba en esos momentos. Me hicieron sentirme importante y con muchas ganas de vestir esta camiseta. Gracias a todos los dirigentes y a todos los aficionados que me han hecho sentir tan querido. Para mí es un honor estar en un club como el Atlético de Madrid. Prometo que voy a dejarme el alma y la vida en cada entrenamiento y en cada partido por este escudo y esta camiseta»

-Esta la gente muy, muy animada como pocas veces ha estado con la llegada de un jugador ¿Te llega la ilusión de la afición por tener un campeón del mundo y al máximo goleador con la selección en el equipo?

Villa: «Sí, todo eso me pone muy feliz, me ilusiona aún más y siempre tengo la motivación máxima. Para mí es un reto y una satisfacción muy grande poder trabajar, que la gente me siga viendo tan feliz.»

–¿Te ha transmitido Simeone dónde quiere que juegues (has sido un nueve toda la vida pero en el Barcelona has jugado en banda)? ¿Qué te ha dicho al respecto?

Villa: «La idea es jugar en la posición de nueve que deja vacante Falcao, pero bueno desde aquí te repito lo que ya le he dicho al entrenador: yo vengo a un equipo hecho, a un equipo ganador a aportar lo que esté en mis manos para hacerlos más grandes y serles más útil. En una posición u otra. Juego de lo que haga falta. Esa siempre ha sido mi actitud en todos los clubes en los que he estado.»

-En tu etapa del Barcelona ¿hubo un antes y un después de tu lesión?

Villa: «No creo que haya un antes y un después. Simplemente que tras la lesión juegue menos partidos. Esa etapa fue muy feliz y se cierra y ahora se abre otra que me ilusiona muchísimo. Estoy muy feliz por esta nueva etapa en un grandísimo equipo como es el Atlético de Madrid. Tengo muchísimas ganas de dar lo mejor de mí.»

– Oyendo tus comentarios sobre sentir que has recibido el cariño que necesitabas, ¿echaste en falta el cariño en tu etapa final en el Barcelona? 

Villa: «No tanto que echara en menos el cariño ahí, sino que aquí me siento importante e ilusionado y han sabido darme el cariño y conectar conmigo a través de los hechos y los proyectos. En el Barcelona no he estado triste ni nada.»

-¿Es también motivador sustituir a un jugador como Radamel Falcao?

Villa: «Es sobre todo un reto. Yo no vengo a que se olviden de Falcao porque él ha sido un jugador mítico para la afición que ha dado éxitos a esta camiseta, pero sin duda es un reto muy bonito intentar yo también escribir una hoja en la historia parecida a la que ha dejado él.»

–Tenías casi decidido ir a la Premier y al final has acabado viniendo aquí, ¿Por qué te has animado a dar ese cambio en tu rumbo?

Villa: «Pues sí es verdad que en los últimos meses habíamos tenido muchos contactos. Parecía nuestro destino pero en tres días el Atleti contactó con nosotros y nos supo transmitir su proyecto. Como he dicho antes ese cariño e hicieron en un corto espacio de tiempo las cosas en el plano personal que otros equipos habían estado fraguando durante más tiempo. Eso en lo personal, en lo profesional se ve. El Atlético de Madrid es un equipo que ha quedado tercero, ha estado peleando hasta el final el puesto con el Real Madrid, que ha competido en Europa que ha ganado la Copa del Rey. Es un equipo que en los últimos años ha conseguido muchísimos títulos, de los que más en el mundo, por lo que en ese aspecto no era muy difícil convencer a Villa ni a ningún jugador del mundo.»

–En el Valencia fuiste un ídolo, ahora llegas al Atlético de Madrid, me gustaría que te mojaras y nos dijeras quien es el tercer equipo de España.

Villa: «Ahí está la historia y el cariño de los futbolistas. Yo  he estado 5 años maravillosos ahí, tengo un gran recuerdo de cómo me ha tratado la afición valencianista. Yo creo que ellos también guardan un gran recuerdo mío. Cada vez que voy me lo hacen saber. En este aspecto soy más estadístico que otra cosa. A cada uno le gustará una cosa. Para mí hoy en día, desde hace unos día el mejor equipo que hay es el Atlético de Madrid. No sólo de España, sino del mundo.»

–¿Condiciona que sea año de mundial tu fichaje por el Atlético de Madrid?

Villa: «No, para nada. Se ha dicho mucho en este caso, pero no es cierto. He salido del Barcelona para jugar en la selección. He salido del Barcelona para jugar lo que creo que puedo. Si no hubiera habido mundial e incluso si no estuviera en la selección hubiera salido para jugar porque adoro este deporte, amo este deporte, creo que todavía puedo dar unos años buenos y en el banquillo no puedo participar lo que quiero.»

–¿Echas en falta algún tipo de jugador que haya que fichar en tu nuevo equipo?

Villa: «Eso no me corresponde a mí. Estoy en cualquier caso orgullosísimo de pertenecer a este club, de compartir vestuario con los magníficos jugadores que ya hay. La plantilla ya ha demostrado en estos años que son muy buenos y pueden competir por ganar todo.»

-¿Ha habido debate con Adrián por portar el 7?

Villa: «No hay ningún debate. Yo le transmití al club que llevaría el número que quedara libre. Son códigos internos del fútbol que todos conocemos bien. El 7 es el número de Adrián que ha lucido todo este tiempo con mucho trabajo, ganas y calidad. Aunque él me lo hubiera ofrecido no lo habría aceptado. Al club ya le dije que me adapto al número que quede libre.»

Y cuándo pensábamos que lo más noticiable era la pléyade de titulares a modo de misivas de amor que había lanzado Villa en su estreno se produjo la situación rocambolesca de la jornada. Tras los toques de David Villa con balón, los posados de rigor ya con la rojiblanca enfundada (no dejo de insistir lo bonito que es el nuevo uniforme) ocurrió una invasión de cazaautógrafos de vodevil. Bastante made in Atleti; de esas cosas que no se ven en muchos otros lugares. Invasión de campo en día de presentación es una situación que puede pasar de cómica a trágica en pocos momentos; un par de centenas de personas se lanzaron al terreno de juego a la caza del autógrafo. Los pocos y desbordados agentes de seguridad se vieron reforzados por unos cuanto policías que con buen criterio habían enviado al campo y escoltaron entre mucho tumulto al jugador de vuelta al vestuario. Sí, ya sé que hay ganas, pero es una paletada como dice mi amigo Jesús, celebrar una presentación con invasión de campo… Encima algún aficionado se retrató intentando arrancar partes del césped recién plantado (¿creerían que era el antiguo San Mamés?)

Entre el final de fiesta algo bochornoso que deslució un poco las frases contundentes de Villa que aún resonaban en los oídos del ilusionado hincha rojiblanco nos marchamos esperando que los otros veintitantos jugadores de la plantilla crean tan ciegamente como Villa (y Cholo) que los límites nos los ponemos nosotros mismos y que lo más bonito está aún por llegar.

Como también he leído hoy, si nos remontamos a los tiempos de Vieri que fue sucedido por Hasselbiank con Kiko como puente, hubo un momento que parecía que íbamos camino a un infierno sin retorno. Y llegó Torres. A Fernando Torres, le siguieron Agüero y Forlán. A estos Falcao. Y al colombiano, Villa. Un celestial suma y sigue de jugadores espléndidos que ocupan casi dos décadas de recuerdos, goles y en tiempos recientes títulos. Villa ha prometido estar a la altura de sus predecesores y honrar la camiseta como merece. Nosotros le creemos porque desde el primer día sonó como uno de los nuestros. ¡Bienvenido Guaje!