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Tengo la sensación de que el Atlético de Madrid no le está dando excesiva importancia a conseguir, o por lo menos intentar, el segundo puesto de la clasificación de la Liga. Antes no ocurría que el Atlético estuviera durante tanto tiempo por detrás de ambos equipos. Pero en esta nueva era de la SAD llevamos 17 temporadas sin quedar por delante de Real Madrid y Barcelona. Desde la temporada del doblete no estábamos tan cerca de poder lograrlo. Sin embargo, hasta hoy no se había percibido ninguna inquietud por parte de la plantilla ni de Simeone por superar al eterno rival.

Creo que para la inmensa mayoría de los atléticos sería un gran regalo poder presumir, al fin, de ser mejores en la Liga que el Madrid. O no. Porque tampoco percibo ese interés por parte de los aficionados. Parece que hay un bastante conformismo al respecto. Con lo que se ha hecho se da por buena la temporada. Y aún falta mucho por conseguir. Por supuesto, ganar la Copa del Rey, pero también terminar la Liga con buenas sensaciones, porque dándole la vuelta al dicho español: bien está lo que bien acaba, podríamos decir: mal está lo que mal acaba.

Hoy Simeone se ha mostrado más ambicioso en la conferencia de prensa. Por primera vez que yo recuerde, ha dicho: «Es mejor terminar segundos en la Liga que terceros, pero para ello hay que pensar en el Getafe«. Me parece muy acertada la frase, ya que aún se está a tiempo de conseguir objetivos bastante importantes. «Nosotros queremos terminar lo más arriba que tengamos posibilidad. La posibilidad la tenemos que buscar y que generar. Y, a partir de generarla, va a aparecer«, apostilló para demostrar una ambición que hasta ahora había permanecido oculta, quizás porque no quiere meter presión a los jugadores ni a sí mismo.

No se va a considerar menos buena la gran temporada del Atlético de Madrid porque termine segundo o tercero, pero realmente quedaría un regusto amargo, al menos para mí, si el Atlético se dejara llevar, como el de la canción de Los Secretos, y no peleara hasta el final por el segundo puesto.

El Atlético ha sido subcampeón ocho veces a lo largo de la historia de la Primera División ¿Por qué no intentar conseguirlo por novena vez?

Simeone podría motivar a sus jugadores con algunas otras cuestiones no relacionadas directamente con el equipo, pero que redundarían en beneficio del grupo. Primero con lo comentado anteriormente acerca del subcampeonato de Liga y también, por ejemplo, con que Courtois pudiera conseguir el trofeo Zamora, trofeo que ahora mismo disputa con Caballero. Y motivar a Diego Costa, a Arda Turan y a Koke, para que Falcao pueda llegar a los 30 goles en la Liga.

Serían unas nuevas marcas importantes que añadir a esta temporada cuyo culmen sería, por supuesto, ganar la Copa del Rey. Ése es el partido de la temporada, pero las otras cuestiones no son menores y hay que concederles la importancia que se merecen. Repasar la historia para seguir haciendo historia es un ejercicio que debería practicarse más asiduamente.