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Esto es Esparta!!!

Al margen de la muy épica, y muchas veces excesiva, descripción que hace Frank Miller en su apoteósica obra 300, que muchos conoceréis por la adaptación/traslación al cine que hizo Zack Snyder, de la batalla de las Termópilas, lo cierto es que allí se lió parda. Sí, eran muy inferiores en número (los 300 espartanos y unos cuantos miles de griegos de diferentes ciudades-estado, hasta hacer entre 5.000 y 11.000 según las fuentes clásicas) y delante tenían al ejército más poderoso de la tierra (y ciertamente, el más numeroso, unos 300.000). Cuando Leónidas, el rey espartano, vio que nunca conseguirían doblegar al enemigo y que el enemigo conocía un paso a través de las Termópilas gracias a un traidor, de nombre Efialtes, decidió minimizar el número de bajas, quedándose a defender el paso con sus espartanos y otros cientos de tebanos y tespios. Unos 1.500 en total.

Murieron todos, claro.

Aún así, para la posteridad queda el hecho de que aprovechando su entrenamiento, su preparación, motivación y adaptación al medio, un puñado (en términos comparativos) de soldados griegos infligieron al poderoso imperio Aqueménida la mayor derrota dentro de una victoria. Y, desde entonces, la batalla de las Termópilas es sinónimo del esfuerzo, que hasta la muerte, hicieron los espartanos que, a la postre, permitió a los griegos vencer en la Segunda guerra Médica (por los Medos, no por los médicos).

Algo así vimos el domingo en Vistalegre. Permítanme presentar a los personajes: Por un lado Leónidas (Dujshebaev) que lleva preparando el encuentro, táctica y mentalmente, adaptando, dentro de las exiguas posibilidades que le permite el calendario, a sus espartanos, los 300, el BM. Atlético de Madrid. Por otro lado, tenemos a Jerjes (o Xerxes, según grafías) con su espectacular ejército persa, esto es, Xavi Pascual y su FC. Barcelona, plagado de figuras. Y aunque algún avispado lector habrá pensado que quiero hacer leña del árbol caído y que nuestro Efialtes no es otro que Arpad Sterbik (o incluso Rutenka), en realidad, ese papel de lo reservo a la pareja de colegiados canarios, Raluy y Sabroso. Ya verán porqué. Y, sobre todo, espero que perdonen que por una vez opine sobre los árbitros, siendo como soy ex-colegiado, yo mismo.

En nuestra analogía ya sólo falta el medio físico, el paso de las Termópilas, o lo que es lo mismo, Vistalegre con más de 10000 personas que, sin abarrotar, llenaban bastante bien el aforo y apoyaron al equipo en todo momento.

A estas alturas imagino a mis lectores con el pulso acelerado, la saliva con tonos metálicos, anticipando el hedor de la sangre, pero debo sofocar un poco esas ansias y volver, poco a poco, al estilo cronista que hemos llevado en esta página. Volver a recordar porqué este partido era tan importante para las aspiraciones del BM. Atlético de Madrid. En esta liga bipolar que es la liga ASOBAL, sólo quedan dos equipos, los que el domingo jugaron. El que se lleve más puntos en esos enfrentamientos, se lleva la Liga. Porque hay tantísima distancia entre ellos y el resto, que a casi nadie le cabe en la cabeza que se vayan a dejar puntos por ahí. Si en fútbol nos parece marciano que el FC Barcelona lleve 43 de 45 (14 victorias y un empate de 15 partidos), en balonmano lleva 26 de 26 (13 partidos, 13 victorias). Es esa superioridad tan brutal que hace que el Atletico de Madrid, segundo en la Liga (11 victorias, 1 empate frente al BM. Aragon, 1 derrota, la de ayer), esté a distancias siderales. Porque francamente, veo más probable que el BM. Atlético de Madrid gane en el Palau, a que el Barça deje escapar algún otro punto. Y por eso, parece que la Liga está perdida a 17 jornadas para su finalización y sólo 3 puntos de diferencia. De locos, eh?

El partido comenzó como sólo podía comenzar, con unas defensas muy intensas, el BM. Atlético de Madrid en 6-0, con profundidad, con la primera línea formada por Gojun-Kallman-Markiewicz-Barachet y Balic y Gª Parrondo en los extremos. Una defensa con mucha profundidad que prácticamente maniató a los gigantes Noddesbo y Sorhaindo y que obligaba a Rutenka al principio y posteriormente a un excepcional Raúl Entrerríos a multiplicarse. Además, Magnus Dahl estuvo acertadísimo en la primera parte, cerrando los pocos espacios que dejaba la defensa. Por el otro lado, 4 armarios empotrados (Gurbindo, Noddesbo, Jernemyr y Morros), las anguilas Tomás y Stranovsky. Y Sterbik. Siempre Sterbik. El «poco» ágil pero siempre presente Sterbik. El hombre capaz de que se le haga la noche a extremos de poca envergadura (sólo Kallman fue capaz de ponerle en aprietos) y con un poder de intimidación en los lanzamientos de 7m que hizo que convirtiéramos 2 de 5. 17 paradas hizo el amigo Sterbik, frente a las 13 combinadas de Dahl y Sabanovic.

Los minutos iban cayendo y la igualdad reinaba en el marcador. Lo mismo se adelantaba el Barcelona, como empataba el BM. Atlético de Madrid y luego se ponía por delante (siempre con la velocidad como aliada). Sólo el concurso de Entrerríos y Sarmiento por el Barcelona y las apariciones fugaces de Markussen por el Bm. Atlético de Madrid le restaba protagonismo a los porteros de ambos equipos (Dahl y Sterbik), verdaderos artífices, junto a las defensas que dirigen, de los guarismos de la primera parte. Y así, con intercambio de golpes, sin tomar ventaja, nos vemos en el descanso con tan sólo un gol de diferencia (11-12).

La segunda parte comenzó con un correcalles impreciso y 3 paradones (1 de Sterbik y 2 de Dahl) que mantenían el marcador hasta que Lazarov en un lanzamiento de 7m conseguía el empate a 12. Y entonces, un cúmulo de despropósitos: Entrerríos da su mejor versión, dando una lección magistral de aprovechar espacios, Kallman al larguero, exclusión de Kallman por ser alto (hubo contacto con Stranovsky, sí, pero menos), Soddesbo en la superioridad consigue colarse detrás de la defensa, parada de Sterbik a zambombazo de Markussen, otra entrada cual bisturí de Raúl Entrerríos merced a la superioridad numérica, no hay entendimiento entre Barachet y Masachs en la continuación de un impar buscando huecos por los extremos y se pierde la bola, otra operación quirúrgica de Entrerríos, ésta desde los 9m, por si creían que el chico estaba descansando en el banquillo. Sale Sabanovic a la portería rojiblanca, los árbitros perdonan un 7m a Soddesbo simplemente porque Markussen claramente lo está buscando (el que el defensa barcelonés tuviera los dos pies dentro del área no pareció importarles demasiado), penetración de Markussen a la segunda línea y Tomás, que pasaba por allí, le hace 7m y le mete un viaje a la cadera que lleva al danés al suelo y le supone la segunda exclusión (Victor Tomás, con toda su cara de bueno, es un hombre al que conviene tener, al menos, a 2 metros de distancia, o acabas desequilibrado en el aire y con riesgo de lesión). Lanza Lazarov el 7m, y lo para Sterbik, Entrerríos en la continuación, frente al aviso de pasivo lanza precipitadamente y Sabanovic le saca el balón con el brazo derecho. Julen sufre un derribo con pronación más propio del jiu-jitsu que del balonmano y provoca la exclusión de Morros (El Barça está con 5). Lanzamiento de 7m que falla Josep Masachs. EL Barça recupera un hombre y sobre el aviso de pasivo, larguísimo, el balón llega a Rocas que, sin ángulo, recibe el contacto de Balic. Exclusión y 7m. Lanza Rutenka y mete el gol. Total, que si no han perdido el resuello para llegar hasta aquí, el Barça ha metido 5 goles y el BM. Atlético de Madrid, sin jugar mal en absoluto, sin rendirse en ningún momento, sin dejar de dar la cara, no ha metido nada (2 lanzamientos de 7m fallados) y encima tiene inferioridad numérica.

Hace 2 meses el equipo habría, inconscientemente, tirado la toalla. Pero no estos espartanos. Estos espartanos consiguieron encontrar a Julen, que no perdonó, consiguieron robar balones, consiguieron apretar en defensa y desafiando a los mismos dioses, consiguieron ponerse 18-19 en el minuto 47 y después de otra fase más igualada, ponerse 21-22 y posesión en el minuto 53. Pero, ¿no se habrán olvidado de Efialtes?. Dicen, los que dicen entender mucho de balonmano, que Raluy y Sabroso son una magnífica pareja arbitral, élite del mundo. Yo, que los conozco desde que ellos y yo estábamos en Primera División (hace 10 años de aquello), me reservo mi opinión personal, que no daré aquí y sólo comentaré el partido en cuestión. El hecho es que lo hicieron mal, muy mal. Y no fue porque voluntariamente decidieran ir en contra del BM. Atlético de Madrid o beneficiar al Barcelona, que no fue así o, al menos, no lo aprecio yo así. Fue simplemente que el criterio que decidieron aplicar en lo referente a las sanciones a las acciones punibles, beneficiaba, enormemente al infractor en vez de al que sufre la falta. Y en ese capítulo, dada la envergadura de la primera línea del Barcelona, el combate fue desigual. Amén de la desigualdad en el criterio sobre los empujones y los agarrones, sancionando todos los primeros y obviando los segundos, con lo que Soddesbo, Morros y Sorhaindo literalmente amarraron a Julen y a la primera línea rojiblanca. No diré que perdimos por los árbitros, porque no es así, pero sí que creo que las decisiones de éstos y, sobre todo, el criterio que aplicaron, perjudicó mucho más al juego del BM. Atlético de Madrid que al del Barcelona. Y a aquél que quiera ver victimismo en mis palabras, le recomiendo que vuelva a ver el partido y cuente las acciones defensivas sin sanción de unos y otros, y la intensidad de las mismas. En los últimos 7 minutos hay 3 acciones de Sorhaindo a Julen en las que lo agarra, lo empuja y lo tira. En todas ellas, los árbitros dejaron seguir el juego (todas eran pase a Julen), y en todas ellas el BM. Atlético de Madrid perdió la posesión. Julen, al igual que muchos, no daba crédito. Mientras, el partido seguía, Rutenka decía, dadme la bola, que yo me encargo y así, iba marcando el ritmo, poniendo el marcador con ventaja azulgrana de 1 ó 2 goles. Sobre los últimos mínutos sólo comentaré que el que Virán Morros aguantara en el parqué sin ser excluído sólo es comparable a uno de los misterios de Fátima, que Sterbik es el mejor portero del mundo, aunque esté cojo, que los árbitros llegaron a pitar una falta que Sarmiento le hacía a Gurbindo (ambos del Barcelona) en contra del Atlético de Madrid, que Victor Tomás, una vez más, se salvó de la roja porque llevaba puesta la capa de confundir +50, y que no tenemos a ningún especialista en los lanzamientos de los 7m. Resultado final 22-25.

Y tal y como ocurrió en la antiguedad, Leónidas y sus espartanos, pese a poblar el paso con los cuerpos de sus enemigos, acabaron regándolo con su sangre. Y los persas ganaron la batalla. Pero acabaron perdiendo la guerra…

22 – ATLÉTICO DE MADRID:
Dahl; Roberto García (2), Barachet (2), Kallman (5), Gojun (-), Jurkiewicz (-) y Balic (-) -equipo inicial- Sabanovic (ps), Miguel Sánchez (-), Edu Fernández (-), Markussen (5), Aginagalde (2), Cañellas (3, 1p), Masachs (-) y Lazarov (3, 1p).

25 – BARCELONA INTERSPORT:
Sterbik; Víctor Tomás (2), Gurbindo (-), Sarmiento (1), Rutenka (6,2p), Stranovsky (3) y Sorhaindo (1) -equipo inicial- Saric (ps), Noddesbo (1), Raúl Entrerríos (8), Ariño (-), Montoro (3), Jernemyr (-), Rocas (-) y Morros (-).

Foto: Club Atlético de Madrid.

 

Seguidor del Atlético de Madrid y aficionado, ex-jugador, ex-entrenador, ex-arbitro de balonmano. Dispuesto a contar los secretos del 20x40.

Comentarios (6)

  1. (…) que Victor Tomás, una vez más, se salvó de la roja porque llevaba puesta la capa de confundir +50 (…)

    Plas plas plas.

    Estoy cansada de que siempre haya determinadas equivocaciones y que se permita el juego duro contra gente como Julen, sólo porque de las 100 que le hacen, se desenvuelve 20.

    Por otra parte, hubo un gol del BM Atletico de Madrid que en mi opinión también fue mal anulado para pitar 7m exclusión. Creo que lo normal era dar el gol y la exclusión, si mis conocimientos no me juegan una mala pasada (o han cambiado el reglamento y ni yo, ni Julen, ni Talan lo sabemos).

    • Creo que estaba pisando. O al menos, creo que eso pitaron. De todos modos, mi descontento con los árbitros del domingo no es por una jugada en particular, que todo el mundo se puede equivocar.

      • Desde luego que la jugada que comento no es la única, si no una más. Creo que no me expresé bien.

  2. Sin ser un gran entendido, sí que me di cuenta de que la diferencia estuvo en la portería, como dice Ozelin.

    Aún así, el Atleti anduvo muy cerca de la victoria.

    • Desde luego que Sterbik estuvo acertadísimo, ese mérito no hay que quitárselo 😉

    • Sterbik estuvo a su nivel. Top 3 del mundo, si no nº1. Y, claro, no hay color. Y Dahl y Sabanovic son grandísimos porteros. Pero no son JJ ni Arpad.